como cada antes de amanecer
rebasé a la mujer de los
gatos de poniente
la he oído exclamar, ay!, aaaaaay!
me he vuelto
¿quién es merecedor de tanto
afecto?
pues quien iba a ser, un
gato,
un gato no, un gatito pequeño
he mirado su carita
me ha dicho que está
contento,
le miman un instante
cada mañana antes de amanecer
y eso le basta
No hay comentarios:
Publicar un comentario